Esta entrada se la dedico a los trabajadores encargados del cuidado de los animales y del humedal en todos sus aspectos. Hasta hace poco había un ciervo herido con alambre de espino enredado en su hocico. Protesté indignado y tras explicarme el proceso, comprendí la tardanza en su cura y también que mi ignorancia había sido muy atrevida. ¡Gracias por cuidarlos!